Existen varios mitos con respecto a la infección de la toxoplasmosis, una zoonosis peligrosa para mujeres embarazadas que pueden desarrollar una toxoplasmosis congénita que afecta al feto. Primero fueron los gatos, lo cual, desgraciadamente desembocó en procedente de cerdos ibéricos alimentados en régimen de intensivo a base de piensos elaborados con cereales y leguminosas.muchos abandonos. Hoy sabemos que con las adecuadas medidas de higiene no existe ese riesgo de contagio.
La carne puede ser otra de las vías de infección, y se creía que entre los productos que podían transmitir este parásito se encontraba el jamón ibérico, pues se debe tener especial cautela con la carne cruda, poco cocinada, o los embutidos y fiambres.
Sin embargo, recientemente se acaba de desmentir el supuesto riesgo del jamón ibérico. Todo gracias a un estudio del Centro Tecnológico Andaluz del Sector Cárnico (Teica), pues el proceso de curación garantiza la inocuidad del producto y la ausencia de Toxoplasma gondii, el causante de esta enfermedad. Siempre que se siga el proceso de curado tradicional del jamón mediante sal marina, y siempre que se respeten los tiempos de curación delimitados por la normativa europea.
Cuidado y exigencia como consumidores
En estos estudios se ha demostrado que el Toxoplasma gondii puede aparecer en ciertas marcas cuyos productores no respetan el tiempo de curado, con lo cual, los consumidores deben de prestar atención y exigir todas las garantías a la hora de adquirir este tipo de productos, especialmente si lo va a consumir una mujer embarazada.
Aún así, cabe destacar que gran parte de las personas hemos tenido ya una reacción inmunitaria a toxoplasma, por lo que hemos desarrollado la correspondiente inmunidad y en consecuencia no habrá ningún problema, así que lo primero es ir al médico para que nos asesore.
Gracias a estas investigaciones, los profesionales sanitarios podrán dejar de sugerir que no se tome jamón ibérico durante el embarazo para evitar esta enfermedad, y establecer mejores protocolos para prevenir la toxoplasmosis.
Por nuestra parte y desde Julián Martín, podemos asegurar que se sigue el proceso de curación adecuado que garantiza la inocuidad de nuestros productos, por lo que si entre alguno de esos antojos se encuentra una buena ración de jamón ibérico, un ibérico Julián Martín es, desde luego, una sana y acertada decisión.